28 DE AGOSTO DIA NACIONAL DEL ADULTO MAYOR
En ocasiones, con la edad, las funciones del cuerpo pueden deteriorarse y perder capacidades, por lo tanto, los adultos mayores son más vulnerables a tener algún tipo de discapacidad.
Cada una de las discapacidades supone un requerimiento diferente por parte del cuidador y de las personas que rodean al adulto mayor, es importante identificar con tiempo cuál es el tipo de condición que se tiene, para poder hacer las transiciones requeridas, procurando que la vida del adulto mayor no se vea alterada.
Conoce más acerca de los tipos de discapacidades en el adulto mayor para así brindarle un mejor cuidado a tu paciente.
Cuando una persona tiene una discapacidad significa que tiene dificultades para hacer una acción o una tarea que al resto de personas les resulta natural, lo cual, en determinados momentos puede complicar su participación e interacción en la sociedad. Esto no significa que no puedan ser parte de ella, pues con la ayuda necesaria, las personas con alguna situación de discapacidad, pueden potencializar otros aspectos de su vida; por eso, el apoyo que se le brinda al paciente por parte del cuidador es esencial para ayudarlo a vivir su vida con normalidad.
¿Qué tipos de discapacidad existen?
Podemos encontrar diferentes tipos de discapacidad, dependiendo del deterioro de la parte corporal del paciente, cada caso es específico y requiere atención personalizada.
- Discapacidad física También llamada discapacidad motora, se refiere a las limitaciones en la movilidad del paciente, puede ser solo la dificultad para moverse o el impedimento total de esta capacidad. Esto puede suceder por la pérdida de alguna extremidad, problemas en los huesos o articulaciones, accidentes cerebrovasculares, artritis o malformación. Este tipo de discapacidad es de los más comunes en los adultos mayores. En los últimos años se ha visto un crecimiento en las propuestas de inclusión, promoviendo la construcción de rampas para sillas de ruedas y la implementación de ascensores en los transportes públicos, facilitando la movilidad de estas personas.
- Discapacidad sensorial En esta, la persona ha perdido total o parcialmente sus capacidades en alguno de los sentidos, normalmente la vista o la escucha, complicando su comunicación. Las personas con discapacidad visual pueden tener ceguera total o más comúnmente, la disminución parcial de ella. Como cuidador debes tener en cuenta algunos consejos:
- Informarse del caso específico del paciente.
- Lo ideal es, antes de empezar a hablar, identificarse o decir el nombre de las personas que están presentes.
- Si el paciente tiene un perro guía, se debe entender que este está trabajando y no se debe distraer.
Por otro lado, se dice que una persona es sorda cuando tiene pérdida profunda o total de la escucha, o hipoacusia si es parcial y puede mejorar con el uso de dispositivos. Estas personas pueden ayudarse por medio del lenguaje de señas, la lectura de labios, letreros o audífonos. De igual manera se debe tener en cuenta:
- En lo posible siempre hablar lento, claro y fuerte.
- Tener paciencia y flexibilidad para enfrentar las situaciones confusas.
- Si no se comprende lo que la persona está diciendo, se le puede pedir que escriba en un papel lo que desea comunicar.
- Discapacidad Intelectual Estas personas normalmente han tenido esta discapacidad durante toda su vida, puede ser heredada, como el síndrome de Down, adquiridas durante la gestación o por daños en el sistema nervioso. Se define como la dificultad cognitiva de aprender, de adaptarse o socializar. Si estás tratando a una persona con este tipo de discapacidad, lo mejor es evitar los cambios en el ambiente, pues ellas se pueden estresar fácilmente cuando les alteran algo en su rutina, además la comunicación debe ser en lo posible, simple y clara.
- Discapacidad psíquica Conocida también como psicosocial, esta discapacidad tiene que ver con las alteraciones en el comportamiento del paciente, pues generalmente padecen un trastorno mental, como la depresión, bipolaridad, esquizofrenia o ansiedad. Estas afectan la manera en que la persona piensa, siente y se relaciona. Lo primero que se debe hacer es informarse muy bien sobre la enfermedad a la cual se están enfrentando, pues cada trastorno es diferente y requiere de distintos tratamientos. Adicional, la tolerancia y la paciencia son claves para poder cuidar a los adultos mayores que tienen esta condición.
- Discapacidad visceral No es muy conocida, pero sí es muy frecuente en los adultos mayores. Este tipo de discapacidad hace referencia a la falla en alguno de los órganos internos de la persona. Quienes la padecen, pueden presentar: enfermedad cardiaca, respiratoria, diabetes, insuficiencia renal, entre otras.
Estos tipos de discapacidades, les impide llevar una vida normal, pero no afecta sus capacidades cognitivas, motoras o sensoriales, sin embargo, como no siempre es visible puede ser difícil identificarla.
Es evidente que existen múltiples discapacidades en la sociedad, el problema es pensar que todas son las mismas, pues no se puede dar el tratamiento que requieren, ni adaptar el entorno para facilitar el diario vivir de las personas que las padecen.
Como cuidadores lo esencial es tener tolerancia a estas situaciones, lo que más necesitan estas personas es a alguien que los entienda y los apoye en su lucha por su integridad, independencia y bienestar.